Ir al contenido principal

Blog

Azul, por Daniel Morán Fougerat

por Fernando Villarreal Gonda el 2019-11-23T06:55:00-06:00 | 0 Comentarios

El pasillo se extiende al poniente. Las paredes son de piedra roja. El camino atraviesa un largo jardín lleno de tulipanes morados, azucenas blancas y rosales. Las flores fueron plantadas de tal manera que forman un laberinto. Caminando a través del pasillo, cuyo piso es de piedra laja, se puede observar de poniente a oriente, dos edificaciones, una en cada extremo, color blanco con cúpulas. Las construcciones son de mármol. Los ventanales son arqueados, en cada habitación hay un balcón. El pasadizo conecta las dos construcciones que conforman el centro histórico del pueblo. Visto desde el cielo, la zona es un gran círculo con dos palacios en extremos diferentes, un jardín que cubre todo, salvo pequeños islotes en medio del laberinto. En los alrededores hay del lado norte un extenso bosque, en el sur y oeste la villa, en el este sectores agrícolas.

Los habitantes del oriente se resguardan en cualquier parte de la construcción, saben que en cualquier momento llegarán. Cada habitante carga cajas llenas de comida y agua, esperando la ración alcance varias semanas. Guardias reales escoltan a todos los desplazados, se aseguran de que el movimiento se haga con orden.

Una pareja de novios pasea por última vez. Ella luce un vestido rojo con puntos blancos y él tiene pantalón de paño y una camisa de botones blanca. La noche anterior veían en el cine del pequeño pueblo una película alemana, la cual narraba la historia de amor entre un actor de cine y una mujer con una deformidad en el rostro, que la hacía parecer del lado izquierdo como un cuervo. La película les había parecido bastante extraña.

Los cabellos de ella son dorados y los de él castaños. Se escucha a lo lejos las campanadas de la iglesia: son las doce del día. Es el único ruido que existe aquel día, ni siquiera los pájaros quisieron cantar.

Caminan por el pasillo, observan que las entradas al jardín están restringidas por puertas metálicas. Apenas horas antes, en la tarde anterior, niños corrían y jugaban escondidas en los largos y laberínticos pastizales, disfrutando el cielo azul y la suave brisa cálida de verano. Ellos, que aún no distinguen entre el bien y el mal, que aún no crean distinciones entre las personas y que solamente les importa comer y correr, ahora yacen en sus casas encerrados con su familia. Los hombres terminan de asegurar sus casas, las mujeres administran la habitación donde se resguardan las personas, verificando que no falte nada, los niños lloran.

Los novios se contemplan los ojos con tristeza, se despide él besándola en la frente. Ella entra a su hogar y él se dirige corriendo a la biblioteca municipal, donde tiene que resguardar unas obras milenarias de la comunidad. La última casa cierra y ahora las calles están vacías. El cielo está nublado, azul. Grandes gotas de agua comienzan a caer.

Pesados tanques militares irrumpen el tranquilo pueblo…

Por Daniel Morán Fougerat

La fotografía utilizada es propiedad de Daniel Morán Fougerat

“Las opiniones expresadas en este Blog son responsabilidad exclusiva de los autores y no representan necesariamente la posición de la Facultad Libre de Derecho de Monterrey”.


 Agregar comentario

0 Comentarios.

  Suscríbase



Introduzca su dirección de correo electrónico para recibir notificaciones cuando se publiquen nuevas entradas.


  Archivo



  Follow Us



  Facebook
  Regresar al Blog
This post is closed for further discussion.

title
Loading...

FLDM

Con reconocimiento de validez oficial de estudios otorgado por el Gobernador del Estado de Nuevo León de fecha 8 de julio de 1988 publicado en el Periódico Oficial del 25 de julio de 1988.

Síguenos
Contáctanos

Morones Prieto 1000 Pte, esquina Alfonso Reyes, Valle Poniente, Santa Catarina, Nuevo

+52 81 8048 2500

contacto@fldm.edu.mx

© 2024 FLDM Facultad Libre de Derecho de Monterrey. Todos los Derechos Reservados.